El tren es el mundo. Nosotros la humanidad. Frase que dicha dentro de la película bien pudiera resumir el mensaje que busca transmitir al público. Metáfora de la propia sociedad, “Snowpiercer” sigue los pasos de la ciencia ficción distópica más clásica, pero no por ello resulta repetitiva o carente de impacto. Todo lo contrario, transmite frescura respecto al género, una ambientación sombría y efectista, y un sentimiento de pesimismo que aun finalizada la cinta pretende concientizar al espectador y no dejarlo indiferente ante todo lo que ha visto.
El gran tren se desplaza sobre los rieles de un mundo devastado por una nueva era glacial, la cual ha sido provocada de manera artificial por los esfuerzos fallidos de la humanidad para erradicar los efectos del cambio climático. Habiendo pasado del punto de no retorno, la civilización colapsa bajo la nieve y los únicos sobrevivientes se abarrotan dentro de los vagones de un tren, que a modo de arca ha sido preparado por un excéntrico millonario para preservar a la sociedad humana.
La vida dentro del tren es brutal para aquellos que a modo de polisones lograron colarse dentro de los vagones. Sin agua, sin comida, desarrollan un comportamiento caníbal que solo puede ser detenido ante la figura del auto sacrificio, de una autofagia que logra imponer el orden y más tarde, la figura de un líder. Sobreviviendo en las bodegas del tren, la clase alta ve en ellos una plaga. Pero en lugar de eliminarlos de raíz, los utilizan como su mano de obra barata y renovable, piezas de recambio para la gran maquinaria que supone el ciclo sin fin del tren.
Como recreación de la humanidad, la cinta cumple con éxito. Aquel largo tren simboliza el conjunto de la sociedad, aquella maquina social que aglutina toda clase de hombres dentro del espacio que denominamos ciudad y cuya finalidad la mayoría desconoce. Al igual que el tren, la ciudad humana está en construcción perpetua, en renovación constante de las partes que la componen. El tren es la propia humanidad que siguiendo un camino preestablecido desconoce a donde le llevara el destino.
Dentro de los vagones vemos una clara división de clases, entre los que más tienen y los que viven en condiciones infrahumanas. Pero más allá de caer en la clásica lucha entre ricos y pobres, el filme nos muestra brillantemente a los titiriteros detrás de los procesos sociales. Ambas facciones no son más que moneda de cambio entre las dos cabezas del tren, entre el líder de la cola y el solitario hombre a la cabeza del todo. Sus decisiones se basan en la conservación del tren. Mantienen a los pobres como mano de obra y a los ricos los encierran en una burbuja llena de privilegios, donde bajo una visión dogmática les hacen asumir una actitud altiva y cruel para mantener el orden establecido.
Toda estructura social dentro del tren esta preestablecida. A tal grado ha sido sistematizada, que incluso los líderes han asimilado a la revolución como un proceso de limpieza, un mecanismo que les permite equilibrar a las fuerzas de sus habitantes. Y si esto es una metáfora de la propia sociedad, ¿Quiénes son los actores que en la realidad se benefician de los sueños y aspiraciones de la población?
Ante un panorama tan deprimente, la solución que aporta la cinta viene de la mano de alguien que se ha confinado lejos del sistema. Entiende que el remedio no es derrocar al líder sino descubrir la verdad, repeliendo la mentira sobre la cual se basa todo el sistema. El mayor logro de cualquier sistema totalitario es conseguir que todos crean que están atrapados, que no existe una salida. El mayor miedo del individuo no es el hambre o la muerte, sino perder aquella comodidad que la sociedad impuesta le ofrece. Preferimos sufrir dentro de un sistema injusto antes de abrirnos paso ante un nuevo camino en lo desconocido. No hay peor prisión que la que nuestras propias mentes nos auto imponen.
ESCENAS CLAVE
1. Arca de Noé Posmoderna
Ante una nueva era glacial, la sociedad moderna perece bajo la nieve. La visión excéntrica de un empresario logra salvar a unos cuantos replicando la sociedad a lo largo de un gran tren.
2. Un Tren hacia la Eternidad
Ante la desaparición de las ciudades las fronteras dejan de existir. Los puntos sobre el mapa se convierten en fechas de un calendario cuya ruta se repite en un ciclo sin fin o propósito.
3. Vagones de Cola / Ciudadanos de Segunda
Viviendo en condiciones de hacinamiento todos aquellos que abordaron el tren sin boleto son abarrotados hacia el final del tren, vistos como parásitos por el resto de habitantes.
4. Alimentación Sintética
Para sobrevivir el hambre y evitar el caos, la clase baja es alimentada mediante barras nutritivas. Al igual que el filme “Soylent Green” su contenido es siniestro e inmoral.
5. La Revolución del Silencio
Como un símil a Gandhi, el líder de las masas empobrecidas proclama paciencia y tolerancia, esperando la situación adecuada para negociar con las clases altas.
6. Abuso y Explotación Social
Como un símil a Gandhi, el líder de las masas empobrecidas proclama paciencia y tolerancia, esperando la situación adecuada para negociar con las clases altas.
7. El Gobierno del Miedo
Ante la menor provocación el sistema responde con gran violencia hacia sus habitantes. Influyendo miedo, infligen castigos inhumanos e brutales ante los ojos de todos.
8. Política Demagógica
Para controlar a las masas, los líderes justifican su posición mediante un “boletaje divino”. Su orden se basa en el medio al exterior y la adoración de la maquina como algo sagrado.
9. La Luz Natural como un Privilegio
Habitando en las bodegas del tren, la clase baja vive en la oscuridad. Sus espacios poco iluminados los deshumanizan y les privan de la concepción de su entorno al exterior.
10. Aprisionamiento Mental
De todos los medios de control, el mayor logro del sistema es conseguir que sus individuos no tienen salida. Sin balas, las armas de los guardias atemorizan las mentes de los débiles.
11. El Rostro Anónimo de la Ley
Todos los aspectos del tren son un reflejo de nuestra propia realidad. Los ejecutores con su vestimenta recuerdan a la policía cada vez más militarizada de nuestra realidad.
12. La Revolución Asimilada
Para evitar la sobrepoblación, la sociedad dentro del tren asimila la revolución como parte del propio sistema, Se convierte en una pieza más de la gran máquina para mantener el equilibrio.
13. Vagones Intermedios / Recursos
Albergando un acuario, un invernadero y corrales, los vagones centrales sirven para saciar las viejas costumbres humanas. De manera artificial son un lujo reservado para la clase más alta.
14. Vagones de Frente / Clase Privilegiada
Viviendo con todas las comodidades, la clase alta habita el tren con desprecio y superioridad hacia el resto. Viven dentro de una burbuja donde su única preocupación es saciar su ocio.
15. Lavado Cerebral
Integrados al sistema, individuos de la clase baja son escogidos para reemplazar a viejos trabajadores. Dándoles un nuevo significado se olvidan de su origen y ansias de revolución.
16. Educación Dogmática
De forma siniestra los niños de la clase alta son educados para adorar a la máquina y de manera radical a obedecer al sistema mediante cantos y juegos de naturaleza subversiva.
17. La Máquina Sagrada / La Cabeza del Tren
Viviendo en soledad, el líder toma las decisiones que mantienen al sistema en orden. Cansado y envejecido, busca generar en el protagonista su propia pieza de recambio.
18. La Verdad detrás del Acero del Sistema
Ante el engaño de la revolución, la esperanza de la humanidad recae en averiguar la verdad. Venciendo el tabú social, al salir al exterior las condiciones para la vida han retomado el rumbo.
FICHA TÉCNICA
Fecha de Estreno: 1 de agosto 2013
Duración: 126 min.
Género: Acción / Ciencia Ficción
Director: Joon-ho Bong
Guión: Joon-ho Bong / Kelly Masterson
Fotografía: Hong Kyung-pyo
Adaptación: Le Transperceneige, cómic
SINOPSIS
En un futuro donde el cambio climático ha provocado un colapso global, un experimento científico para contrarrestarlo termina por provocar una nueva era glacial. Los únicos sobrevivientes son los habitantes de un extenso ferrocarril, cuyo motor perpetuo recorre todo el planeta.
El tren está dividido en dos clases, la delantera integrada por un grupo privilegiado y mezquino; y la trasera, humanos en condiciones deplorables, quienes hartos de su situación llena de abusos deciden organizar una revolución para hacerse del control de la máquina.
